Las comisiones las conocemos de antemano, pero el rendimiento no lo puede garantizar nadie.
Lo que nos permite analizar el Índice de Rendimiento Neto es lo que si han hecho bien algunas Afores en cuanto a la elección de sus portafolios y de la gestión activa en el pasado.
Es importante considerar que cuando observemos minusvalías en nuestros ahorros consideremos el momento en que se dan estas pérdidas. Por ejemplo, sabemos que si la tasa de interés sube en los siguientes años, los bonos a tasa fijas sufrirán una valuación a la baja, porque los precios de los bonos se comportan inversamente proporcional a la tasa de interés.
Pero si bajan las tasas de interés los precios de los bonos aumentarán al igual que las valuaciones de los activos en renta variable. No hay que perder la vista en el objetivo final y este es la jubilación que para muchos faltan más de 20 años. Con este horizonte de inversión tan largo, lo que pase en el corto plazo puede ser irrelevante si en un inicio se tomaron las decisiones correctas de inversión.